Observando lo que pasa en nuestro país, nos da la impresión de que estamos en un cine de sesión continua, de esos que con un breve descanso entre una proyección y otra, veíamos película tras película. Bien es cierto que las películas eran distintas, pero también lo es que en el fondo eran similares, o bien comedias, o policiacas o
de terror, etc.
En nuestro país nos da la impresión de estar en uno de esos cines, pues por cambios que haya cara a la galería, en el fondo nos encontramos siempre con lo mismo. Todo son buenas palabras, promesas, propósitos de enmienda en algunos casos, etc.
Todo ello se lo debemos agradecer a nuestros no queridos políticos, salvo algunas honrosas excepciones. Se pasan los días diciéndonos lo que saben que nos gusta escuchar, aun siendo ellos mismos conscientes de que no lo van a cumplir.
Debemos de reconocer que gran parte de la culpa de que así ocurra la tenemos los ciudadanos de a píe, por dejarnos engañar y aguantar con el marrón, como vulgarmente se dice.
Seamos conscientes, todos sabemos que nos mientes y engañan miserablemente, que, si cumplen con algo que nos dicen, si es beneficioso para nosotros, es por equivocación. Lo primero para ellos son sus luchas intestinas para mantener la cuota de poder que detectan.
Esto no es nada nuevo, por eso denominamos a esta reflexión “continuamos”, porque en verdad, continuamos con las mismas historias de siempre. Pasan los días y por mucho que nos dicen, en verdad todo sigue igual. Nuestro país más desorganizado, con mayores enfrentamientos internos y significando menos a nivel internacional.
Como apuntábamos anteriormente, debemos ser realistas y sinceros, y apechugar con nuestra responsabilidad en todo lo que pasa, que no es poca. Es más, quizás seamos los máximos responsables de todo, por aguantar todo.
No debemos equivocarnos, una cosa es ser buena persona, que debemos serlo, y otra muy distinta aguantar que se rían de nosotros y nos tomen por tontos. Eso bajo ningún concepto.
Se nos ocurre la idea de organizar una “resistencia civil”, de carácter nacional, con todo lo que ello implica. Cromos que es la única vía pacífica para salir del atolladero en que nos tienen metidos. Si todos actuamos unidos y al unísono venceremos. El desgobierno no podrá hacer frente a la situación y no podrá emplear la fuerza contra nosotros, suponiendo, lo que es mucho suponer, que esta aceptase actuar contra ciudadanos que actúan pacíficamente. No olvidemos que ellos también son ciudadanos y están aguantando lo mismo o más que nosotros.
Así pues, creemos que, mediante manifestaciones masivas, desobediencia, boicots, huelgas, etc., podemos hacer que “cum fraude” y sus colegas cambien de actitud y se pongan a trabajar de verdad a favor del pueblo.
Por de pronto ya estamos acostumbrados a que cuando nuestro por desgracia jefe, va a algún sitio y hay una manifestación, le falta el tiempo para desaparecer.
Como al parecer ha cogido la costumbre, procura aparecer lo menos posible por el Congreso de Diputados. Suponemos que es para no tener que aguantar las broncas que puedan echarle.
Lo dicho, tenemos que organizar la resistencia civil, su triunfo será el triunfo de España. Nosotros les aconsejamos a esos políticos del tres al cuarto que se vayan cuanto antes, al menos así tendremos algo que agradecerles. Les aseguramos que si se escapan haremos la vista gorda, y les dejaremos huir tranquilos. No creemos que con este ofrecimiento puedan quejarse de nada, es mucho más de lo que ellos han hecho por nosotros.
