Es lo que le recomendamos a todos, estimados conciudadanos. Pero, quede claro, cuidadito sí, pero miedo y cobardía no.
Viene esto a cuento del llamado “Plan de Regeneración Democrática” que para ser realistas deberíamos llamarle “Plan de Regeneración Dictatorial”, porque en el fondo, es eso lo que es.
“Cum fraude” apoyado por sus vividores, ha llegado a la conclusión de que en nuestro país hay demasiadas noticias falsas y tergiversadas que lo único que hacen es engañar al personal, por lo que hay que poner remedio a tal situación.
Dicho y hecho, establece el citado plan, que contiene treinta y una medidas, con el que teóricamente originará que solo nos enteremos de verdades.
Así visto puede parecernos muy bien, pero enseguida nos surgen las preguntas. La primera de ellas es saber quien o quienes formarán el organismo que se ocupará de aplicar el susodicho plan. Pensamos, y no creemos equivocarnos, que serán personas nombradas por “el puto amo”, como lo denomina uno de sus admiradores.
Si es así, mal empezamos. Un amo tiene esclavos, y ¿quiénes serán los suyos? Ya se pueden suponer que pretenderá que seamos los ciudadanos españoles. Para algo estamos, para creernos sin rechistar, todo lo que diga el amo.
Intentarán hacernos tragar todo lo que nos digan, porque ellos serán fieles reflejos de la verdad y nunca nos mentirán. No olviden que cuando al jefe se le caza en alguna mentira, nos aclara que no es tal, sino que simplemente ha cambiado de opinión. Debemos comprenderlo, una persona con grandes inquietudes intelectuales debe darle muchas vueltas a los temas hasta que se convence de que por fin ha llegado a lo correcto.
Aún así, como somos incrédulos, seguramente a partir de ahora nos llamarán malas personas. Lo sentimos, pero no entendemos tanta regeneración democrática, cuando nos encontramos con que un día sí y otro también, el desgobierno nos oculta información que según la normativa vigente debería facilitar a los ciudadanos.
Ya no hablamos de ciertos enredos en los que están metidos familiares muy próximos a su jefe que se tratan como secreto de estado.
Bien es cierto que a veces hacen lo que les da la gana, arrogándose privilegios que no tienen y no pasa nada. Un ejemplo lo tenemos en la estancia en la sala vip del aeropuerto madrileño de cierta persona.
Nos falta por saber que puede ocurrirle a la persona o al medio que difunda una noticia que el organismo creado al efecto considere falsa. ¿Lo multarán? ¿Podrá hasta ir a la cárcel?
Por eso decimos cuidadito. Tal como transcurren las cosas no sabemos a qué nos arriesgamos. Vale más prevenir que lamentar.
Tengamos en cuenta que estamos, por desgracia, bajo la bota de un hombre cuya mayor y única preocupación es el mismo. Todo lo demás es secundario.
Se ha llegado a los extremos de que un diputado de la asamblea madrileña ha dicho a sus oponentes, en un debate en la misma “ustedes tienen envidia de Sánchez porque está muy bueno” Ante tal afirmación, la pregunta que lógicamente nos hacemos no la exponemos por precaución, tengamos cuidadito.
Sospechamos que el citado Plan no es más que otro paso para intentar implantar una república. Como es el puto amo y está muy bueno es muy posible que lo intente. Por de pronto ya ha desalojado una tumba en el Valle de Los Caídos, posiblemente con vistas para reservársela para él, lo que concordaría con su afán de pasar a la historia. No sería de extrañar.